Hace años fue la voz que enamoró a millones de espectadores a través de la televisión. Hoy es una artista que lucha por publicar su cuarto álbum de manera independiente. Blue bird, que así se llamará, se está financiando a través de crowdfunding por su público, que con apenas dos semanas de su arranque ya han hecho que más del ochenta y cinco por ciento del reto esté completo. Virginia Labuat se sincera con nosotros para hacer balance de su carrera y para contarnos cómo están siendo los preparativos de este disco tan especial para ella.
ENTREVISTA Y FOTOGRAFÍAS: MARIO TEMIÑO
TITULARES:
«Si quería ser totalmente independiente no me quedaba otra que lanzarme al vacío»
«Implicar al público es muy arriesgado, no sabía siquiera si iba a llegar a los mil euros»
«En este álbum voy a mostrar una cara que no he mostrado»
«He llegado a pensar más de una vez que no podía más»
«He tenido muchos fracasos porque no he dejado de intentarlo, pero eso en sí es una victoria»
«Creo que Viajando con Chester es un buen sitio para reencontrarme televisivamente con Risto»
- Estás a punto de grabar tu primer disco fuera de la discográfica Sony Music, ¿qué pasa para que dejes de formar parte de ella?
Los motivos han sido unas diferencias en cuanto a la dirección artística y la implicación que yo quería que ellos tuvieran. De alguna manera, este disco y yo necesitábamos un rumbo diferente para que el proyecto continuara, con el cual la discográfica no estuvo de acuerdo. Necesitaba una implicación mayor en el departamento de marketing, y por los motivos que fueran tampoco estaban de acuerdo. Respeto mucho su decisión, pero también respeto mucho mi proyecto, entonces como hubo ese desacuerdo decido que es el momento de desligarme de ellos, que lo respetan, lo apoyan y me dan la carta de libertad de muy buenas formas y con todo el buen ánimo del mundo. Cada empresa tiene sus prioridades y tiene que velar por sus intereses, que es lo que hemos hecho ambos.
- Blue bird será tu cuarto disco, ¿por qué decides en este momento hacer el crowdfunding?
Cuando hice público que ya no estaba con Sony Music pasó algo inesperado. Empecé a ver que salía gente para darme apoyo y calor de la que hacía mucho tiempo que no sabía y que pensaba que ya no estaban. Sentí un apoyo que me hizo plantearme algo en lo que siempre había pensado, como es el crowdfunding, el cual respeto muchísimo y admiro a cualquier artista que lo haga porque creo que hay que tener valor para hacerlo. Pensaba que si yo lo hacía era mi último recurso, y pensaba que si quería ser consecuente con la decisión que había tomado y tener el nivel de implicación que quería, no me iba a tocar otra que auto-editarme y auto-financiarme. Implicar al público es muy arriesgado, me podría haber metido un buen porrazo porque no sabía ni siquiera si iba a llegar a los mil euros. De esta manera también iba a ver quién estaba ahí realmente, cuánto se iban a implicar y si esta locura que emprendí hace tantos años tiene sentido o no. Si quería ser totalmente independiente no me tocaba otra que lanzarme al vacío. Lo he hecho de corazón y la gente me está respondiendo de la misma manera. Están haciendo verdaderamente un esfuerzo muy grande por poner ese dinero, porque la media de lo que están poniendo no son ni diez, ni quince, ni veinte euros: son cuarenta y cinco.
- Y además, a menos de dos semanas del arranque ya tienes el ochenta y cinco por ciento financiado, ¿cómo estás viviendo esta experiencia?
Estoy metida y embalada en una montaña rusa emocional en la que me siento muy sensible. El otro día puse un post en mis redes sociales en el que salía una foto de mi habitación, que es donde compongo, y hubo una persona que puso que parecía que me estaba reconciliando con algo de lo que había estado huyendo en los últimos años, y que por fin me estaba reencontrando conmigo misma. Lo estoy viviendo un poco así. También lo he visto con las fotos que hemos hecho para este reportaje. Yo también siento que ahora me parezco más a la persona que siempre fui, y supongo que es inevitable haberme perdido en una especie de reflejo por todas las cosas que he vivido y que me han pasado en un plazo de tiempo muy corto. Creo que nadie está preparado para asimilarlo como si nada. Quedan casi cuarenta días y no me lo puedo creer. Gracias es una palabra que se me queda muy corta para definir lo que siento. De una forma u otra siento que realmente merece la pena que me esté dedicando a la música. Me hace pensar en cómo y cuándo perdí ese sentimiento que hoy estoy volviendo a tener, y todo eso es culpa de la gente que me está apoyando y que cree en el proyecto.
- ¿En qué momento, o cuándo, tienes la sensación de haberte perdido?
El año de después del programa no era consciente, pero ahora miro hacia atrás y pienso en lo perdida que estaba. El por qué no lo sé. La experiencia que tuve es extraordinaria para lo bueno y para lo malo, y encima la mía en concreto fue más extraordinaria todavía, y eso es normal que afecte. A mí me afectó como me afectó. Me tiré un año entero vistiendo de negro, pintándome los ojos de negro y siendo muy introvertida para lo extrovertida que he sido siempre. Siempre estuve tranquila conmigo misma, y en aquel entonces no lo estaba; fue algo que fui perdiendo paulatinamente y que tendría que haberlo ganado por el apoyo que tuve, pero no fui consciente. Incluso ganando no me dejaron ganar. Cuesta mucho trabajo, pero es emocionante recuperarlo.
- Después de decirme todo esto, ¿crees que estás en tú mejor momento tanto personal como musicalmente?
Sí, siento que estoy preparada. Para mí todo esto está siendo una sorpresa. No tenía planeado que pasara esto con Sony, ni tenía planeado hacer un crowdfunding. Me voy adaptando a la vida como las circunstancias se van planteando. No sé si es si es el mejor momento, pero todo apunta a que sin duda lo es, y creo que si había algún momento para desligarme de todo y ser al cien por cien independiente es ahora. Hace seis años solo estaba preparada para confiar en alguien, porque me estaba metiendo en un sitio del cuál no sabía nada y además estaba muy desprotegida.
- ¿Sientes más responsabilidad y más presión ahora que es tu público quien te está financiando?
Sí, es una cosa inevitable. Veo que se va acercando el momento de conseguir el objetivo del crowdfunding y es inevitable pensar en el siguiente paso que es hacer el disco, y pienso en que tiene que quedar espectacular por todo lo que está haciendo la gente. Ahora todo es muy emocionante porque siento que estoy piel con piel con esa gente, no hay ningún intermediario, tomo yo todo el rato las decisiones y me siento más responsable aún que antes. Si hay que echarle la culpa de algo a alguien me la van a echar a mí, así que lo único que hago es hacerlo todo de corazón e intentar estar pendiente al doscientos por cien y hacer que la gente se sienta correspondida en la medida que me estoy sintiendo yo. Al final esto es una relación muy directa y tienes que cuidarla y regar todos los días con mucho mimo para que no se estropee.
- Este nuevo trabajo va a ser el segundo álbum consecutivo que produce Bernardo Calvo, ¿va a seguir la línea musical de Night & Day o va a haber algún cambio?
Ambas cosas a la vez. Efectivamente va a seguir la estela de Night & Day, lo que pasa es que en este álbum voy a mostrar una cara que no he mostrado en los trabajos anteriores. Ni va a ser un sonido tan oscuro como el de Night & Day, ni va a ser tan brillante como el de Dulce hogar. Voy a enseñar una parte más rockera y sureña americana. Van a ser canciones de pop, que es lo que yo hago, y va a estar influenciado por el country, el folk, el blues, el jazz… Va a tener canciones que te pongas por la mañana y sientas que te vas a comer el mundo, que es lo que yo he sentido componiendo. He descartado muchas canciones lentas que me encantan y que probablemente haga un disco con ellas en el futuro, pero ahora tengo ganas de sentir la sensación de querer ir al campo y gritar por puro placer.
- No sé si me he perdido algo, pero es la primera vez que te oigo decir tan claramente que tú haces música pop, ¿te da miedo lo que pueda pensar tu público del estilo pop?
No. En el mundo de la música hasta Chopin hacía pop. El pop son melodías que recuerdas, que molan mogollón y son maravillosas. Yo he escuchado toda la vida pop y sé que es lo que hago, no me avergüenzo, me siento muy orgullosa aunque también me guste el blues y el jazz, a pesar de que yo no haga ninguna de esas dos cosas. Hago pop que está influenciado por un pop de fuera. Me encanta el pop español, pero por una cosa u otra yo he escuchado mucha más música de fuera y la música americana de los cincuenta o los sesenta son melodías de pop.
- Quince mil euros es la meta del crowdfunding, ¿es una cantidad suficiente para hacer un buen disco hoy en día?
Según mis cálculos, y según el entorno que hemos creado mi equipo y yo, sí. Tengo la suerte de rodearme de un equipo en el que confiamos entre nosotros mutuamente, aunque no es fácil hacer algo de gran calidad por un precio barato. Se puede hacer por menos, sí, pero también puede salir peor.
- Si te lo propusieran ahora mismo, ¿volverías a firmar con una multinacional como en la que estabas o te niegas?
Depende del contrato que me pusieran por delante y de la ilusión que viera. Todo tiene su momento. Yo me he emocionado mucho estando con Sony Music. Cuando hice el disco de Labuat, cuando Risto me dio la maqueta del primer álbum… Me acuerdo de ese momento muy bien. Lloré cuando sostuve la maqueta del disco en mis manos; no me podía creer que ese momento estuviera pasando. Y Sony estaba ahí, estaban poniendo dinero, ilusión… estaban implicados y eso se respira cuando tratas a las personas. Cuando Javier Portugués me dijo que ya podía buscar productor para el segundo álbum no me lo podía creer, y cuando llegó el tercer álbum y no tuve que llamar a nadie sino que me llamaron a mí fue increíble. Todo eso lo he hecho de la mano de Sony Music, solo que simplemente esta es una etapa de mi vida distinta en la que he tomado estas decisiones, y que creo que tienen mucho sentido ahora.
- Y sinceramente, ¿has pensado en algún momento en tirar la toalla?
La verdad es que sí. Hay momentos de incertidumbre en los que tanta gente que había a tu alrededor desaparecen, piensas que nadie cree en ti, piensas que todo era una ilusión tuya… Yo he llegado a pensar más de una vez que no podía más. He llegado a pensar que igual es que no valgo lo que yo creo que valgo, y que igual no merece la pena el trabajo que estoy haciendo por intentar que mis canciones lleguen a la gente. Al principio te da el típico bajón de llantina y soledad en tu cuarto, pero luego lo acabas compartiendo con alguien que lo nota y acabas desahogándote, te abren los ojos, te hacen recordar todo lo que llevas andado y superado, los momentos vividos, las victorias alcanzadas… Entonces piensas que lo que estás teniendo es solo un mal día.
- Ahora que estamos haciendo balance de tu carrera, ¿te ha ido mejor o peor de lo que esperabas cuando empezaste?
Me ha ido mejor, si te digo la verdad, porque yo sabía que lo del programa era una cosa efímera, tan efímera que en cuanto dejara de estar en televisión se iba a esfumar. Me ha ido mejor porque mi amor a la música es real, no es un afán por la fama. Desde que soy muy pequeña tengo muy claro que quiero dedicarme a la música y vivir de esto, no quiero salir en una revista. Creo que me ha ido mejor de lo que pensaba porque no me he perdido en ese sentido. He seguido teniéndolo muy claro y he sido muy constante en mi decisión de cuando tenía quince años de querer dedicarme a la música. He tenido muchos fracasos porque no he dejado de intentarlo, pero eso en sí es una victoria, y aquí estoy contándote que estoy preparando mi cuarto disco y que todo apunta que voy a poder hacerlo. Luego ya Dios dirá, pero de momento me ha ido mucho mejor de lo que esperaba.
- ¿De cuál de todos los pasos que has dado en todos estos años te sientes más orgullosa?
Me siento orgullosa de haber sido y ser fiel a mí misma cada día.
- Últimamente estás muy unida en lo profesional a Jimmy Barnatán, ¿cómo es trabajar con él?
Es un descubrimiento y un orgullo, porque compartir música con otros artistas que me gustan es algo que he hecho menos de lo que hubiera querido en mi vida. La historia de Jimmy es muy especial porque nos conocimos en la radio y fue muy bonito. Él me escuchó cantar en directo y le gustó mucho. Nos pusimos en contacto y quedamos. Hicimos algunas colaboraciones y flipé cuando le escuché. Me siento orgullosa de él y de nuestro proyecto The Ring of Fire porque es muy dinámico y muy gracioso. Hacemos como un teatrillo en el que estamos peleados y luego al final hacemos las paces cantando dos temas que cantaban John Carter y Johnny Cash. Los dos tenemos una raíz musical en común y tampoco me he encontrado con artistas con los que lo tenga, y que además nuestras voces se compenetren tan bien. Ha surgido una amistad muy linda.
- Desde que se estrenó Viajando con Chester, el programa de Risto Mejide en Cuatro, siempre has sido una de las más esperadas para sentarte en el famoso sofá, ¿crees que llegará el momento?
No lo sé, habría que preguntárselo a él. A mí me encantaría, creo que Viajando con Chester es un buen sitio para reencontrarme televisivamente con Risto. Es un gran programa en el que hace muy buenas entrevistas. Lo veo en casa y la verdad es que me gusta mucho porque realmente veo a Risto. Me ha podido gustar más o menos lo que ha hecho en televisión, pero desde luego aquí sí que veo al Risto que más mola y es el más auténtico.
- Ya para terminar, ¿qué esperas de Blue bird?
Continuar con este sueño.
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@VirginiaMaestro
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