Mientras que muchos/as jóvenes se iban de acampada para relacionarse con la naturaleza, los que nos quedábamos disfrutábamos de la maravillosa programación religiosa que ponían a nuestra disposición todas las cadenas de televisión. Personalmente, he llegado a la conclusión de que la Iglesia impone como penitencia a todas las cadenas un Jueves y Viernes Santo de películas cristianas. Y es que, un año más, hemos vuelto a ver entre palomitas y clínex las mismas películas que año tras año nos imponen las cadenas.
Además, nuestras series han hecho parón, por lo que hemos tenido el doble de programación religiosa a todas horas. Hubo un momento, no sé exactamente de qué día ni a qué hora, que pasaras al canal que pasaras tenías o bien anuncios, o bien películas del estilo de Ben-Hur. Y no me refiero a películas de ese género sino a películas que tienen 500 años y que han emitido tres veces por año.
No sé si es que no se realizan películas de estilo religioso o si es que las cadenas prefieren no comprar y tirar de esos clásicos que reúnen a toda la familia después de cada comida de Semana Santa. Lo cierto es que entre el parón de las series y las películas religiosas, esta Semana Santa ha sido como lo fue la navidad a nivel televisivo: infumable.
Por otro lado, tenemos el final de GHVIP, cuya final no solamente ha sido la esperada por muchos sino que además ha traído cola debido a la victoria de Belén Esteban. De hecho, han estirado el programa incluyendo dos debates finales… ¿Para qué? Para estirar la gallina de los huevos de oro. El día que el fenómeno Belén Esteban deje de funcionar me temo que habrá una cadena que no solamente perderá seguidores, sino que además se quedará noqueada.
Tras el parón mencionado antes, vuelven las series: Bajo Sospecha, -a la cual le queda un capitulo, y de la cual se rumorea una segunda temporada-, sigue siendo igual de brillante en cada capítulo, así como su rival de día: El Ministerio del Tiempo, que anunció a bombo y platillo que va a tener una nueva temporada.
Hablando de nuevas temporadas… Aún estamos a la espera del comienzo de El Príncipe. Por lo que es sabido, debía haber sido estrenada hace unos días, pero por sorpresa para críticos y seriéfilos Mediaset decidió no estrenar, probablemente planeando otra nueva contraprogramación. Y es que estamos asistiendo a una batalla sin final entre Antena 3 y Telecinco, sin darse ellas cuenta de que los grandes perdedores directos somos los espectadores, y los grandes perdedores indirectos son ellos mismos, ya que en muchas ocasiones preferimos ver ambas series rivales online.
Error de Antena 3 en cuanto a programación fue no emitir la pasada semana Bajo Sospecha con la excusa de Semana Santa. Lo único para lo que sirvió fue para que perdieran seguidores, mientras que El Ministerio del Tiempo siguió en emisión a pesar de las fechas. Y digo esto porque el lunes 6 también era fiesta en algunas Comunidades Autónomas. Si haces parón por Semana Santa, haz el parón completo teniendo en cuenta a todas las comunidades, no solamente a donde se da al play cada lunes por la noche.
Y para acabar, dos breves: Allí Abajo me parece que es la copia mala y estirada de Ocho Apellidos Vascos. Y este domingo comienza Supervivientes.
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