Si pensamos en los gustos musicales de las personas que conocemos podremos observar varias cosas: que las preferencias por autores, épocas, géneros, intérpretes… son muy diferentes; que, mientras unos están escuchando música a todas horas, otros prefieren hacerlo en momentos puntuales; que para algunos la música es un entretenimiento más, para otros una pasión, algo imprescindible y para otros pocos una profesión, una vocación.
Muchas y muy variadas opciones y solo una muy infrecuente, rara, casi desconocida: ¿sabemos de alguien a quien no le guste nada la música?
La respuesta es no, un no rotundo. En YourWay Magazine lo que más nos encanta del mundo mundial es la música, bailar y por unos minutos no pensar en nada más. Y si ya es en directo mucho mejor.
El pasado martes pudimos asistir a un concierto que nos dejó a todos los allí presentes con la boca abierta. Estoy segura de que muchos de nosotros no nos imaginábamos lo que nos íbamos a encontrar esa noche.
Teníamos delante a un chico, compositor y cantante, que se subía al escenario con una guitarra y a sus espaldas una banda muy fiel de músicos que le acompañan allá donde va. Os preguntareis de quién estamos hablando. Muy atentos, coged papel y bolígrafo porque no le vais a querer perder la pista a partir de ahora: su nombre es Michael Foster.
Un jovencísimo artista que nos conquistó a todos desde el minuto uno con su arte, sus canciones y su buen rollo. Su música nos recordó muchísimo a ese pop británico de los años 90, caracterizado por la delicadeza del sonido, la simplicidad de las canciones con influencias de bandas tan conocidas como pueden ser los Beatles.
A Foster, aunque recién llegado al panorama musical, no le falta experiencia y tablas a la hora de saber llegar al público. Viéndole parecía que llevara toda la vida encima de un escenario. Con una voz cálida y melódica, que nos recordó vagamente a Liam Gallagher, el cantante de Oasis, supo meternos en el bolsillo a medida que iba avanzando el espectáculo.
Fue todo un honor poder asistir al nacimiento de una estrella de este calibre y estamos seguros de que nos lo cruzaremos muy a menudo a partir de ahora. Ha puesto la quinta marcha, despegando como un cohete hacia el éxito y desde luego no tiene pinta de querer frenar; a este chico ya no hay quien le pare.
Con todos estos datos os habrán entrado ganas de dejar de leer esta noticia y darle ahora mismo al play a una de sus canciones, así que corred y no os los perdáis. Vais a alucinar, garantizado.
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