La gala final de Masterchef Celebrity ha acabado y ya tenemos al concursante ganador de esta segunda edición del reality. La victoria estaba discutida entre Silvia Abril, Patricia Montero, Saúl Craviotto y Jose Corbacho y ninguno de ellos estaba dispuesto a irse a un paso de conseguir el ansiado trofeo y así poder ayudar a la causa que ellos decidían.
Patricia y Jose, a un paso de la final
Tras la primera prueba en la que tenían que seguir los pasos de la chef para conseguir hacer un plato lo más parecido posible al que ella hacía delante de ellos, el primer finalista elegido por el jurado ha sido Saúl. En las pruebas de exterior se han jugado Silvia, Jose y Patricia el otro puesto para batirse en duelo con él en el último escalón del concurso para convertirse en el ganador de Masterchef Celebrity 2.
El postre que tenía que elaborar Patricia le ha supuesto complicaciones, no pudiendo presentarlo al completo y perdiendo así la opción a ser finalista. El jurado, en una decisión difícil, han decidido que Silvia era la ganadora y tenía que batirse en duelo con Saúl.
Saúl y Silvia en el duelo final por la victoria
El último cocinado ha sido definido por el propio Pepe como si fuese David contra Goliat. La aparente tranquilidad con la que Silvia ha comenzado el cocinado chocaba de lleno con la actividad de Saúl por arriesgarse con técnicas novedosas. Sin embargo, los jueces se han desecho en halagos hacia ambos por arriesgarse y conseguir platos que, según sus palabras, «muchos restaurantes quisieran tener«.
Aunque ambos se han dejado la piel en cada plato que han cocinado, solamente uno podía alzarse con el trofeo y el título del segundo Masterchef Celebrity. Han sido un claro ejemplo de superación al arriesgar y estar mucho tiempo estudiando y aplicando todo lo que han ido aprendiendo. Tras deliberar, el jurado ha decidido que el ganador de la edición sea Saúl Craviotto, que suma otra victoria más a las que lleva a sus espaldas en las Olimpiadas.
Una edición llena de emociones
Ya nos lo confesó Silvia Abril en una entrevista: iba a haber lágrimas. Todos los concursantes se han mostrado tal y como son con sus mejores y peores días a lo largo del concurso, convirtiendo esta edición en dos polos opuestos como son la risa y el llanto. Las emociones, ya sean para bien o para mal, han hecho que den lo mejor de sí en cada cocinado.
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