Cris Méndez saca a la luz su segundo trabajo llamado “Zona de Confort”, una autoproducción que muestra a una Cris con mucha fuerza y con muchas ganas de comerse el mundo y de darse a conocer en solitario. Después de 7 años en la banda de Dani Martín como corista y guitarrista, la cantante ha decidido lanzarse ya que tiene Las Alas (como su propio single se llama) para hacerlo.
Hablamos con ella de esta nueva aventura, llena de miedos, ilusión y ganas; y también de lo que han sido para ella estos años de aprendizaje que le han llevado hasta este mismo momento en el que vamos a conocer a una artista que llega pisando fuerte para hacernos sentir su música y su forma de vivir la vida, porque como ella misma dice «o te mueves o caducas».
TITULARES
Sobre este segundo disco: «Es muy autobiográfico del momento vital en el que me encuentro»
«Tenía que tomar la decisión de quedarme siempre de corista y protegida por Dani (Martín) y por su proyecto o hacer que mi proyecto saliera adelante»
«Dani me ha aportado absolutamente todo. Han sido siete años de una masterclass constante»
«Soy más cantante que guitarrista, pero estoy luchando para que eso se iguale»
«Me apetece llevar mi música a cuantas más partes del mundo, mejor»
P. Vienes a presentarnos tu segundo trabajo “Zona de Confort”, háblanos un poco de él.
Bueno, como has dicho es mi segundo trabajo, pero para mí es un poco el primero, en el sentido de que es “Cris” totalmente sola. En el primer disco estaba como muy arropada y muy entre algodoncitos formando parte de la banda de Dani (Martín), y ahora estoy totalmente sola ante el peligro. Precisamente sobre esto habla el título, sobre salir de tu zona de confort; pasar un poco de susto en ciertas ocasiones de la vida y salir de los sitios en los que estás a gusto, tranquila y cómoda para poder aprender y mejorar.
P. ¿Qué crees que se necesita para salir de la zona de confort?
Salir de tu ciudad, irte a vivir a otro sitio… salir, aunque sea literalmente de la cama cada día. Si te acomodas en una etapa de la vida te quedas estancado, y eso es para mí estar en una zona de confort; estar muy a gusto, muy confortado, pero estancado. Por eso, todo lo que sea cambios, salir de ahí, pasar ese momento de nervios de llegar a un sitio nuevo, a un grupo de amigos nuevos, a un trabajo nuevo, o a cualquier cosa que haga que se te acelere el corazón, es salir de la zona de confort. Es la única manera de evolucionar y la que a mí me hace crecer, ya que o te mueves o caducas.
P. Este disco ha sido una autoproducción. ¿Es un proceso difícil?
Es un proceso muy gratificante porque al final, cuando el resultado es el que ha sido, llega un punto en el que te da igual, entre comillas, que guste o no guste porque a ti te encanta. Es por eso que no puedes hacer algo en función de lo que quiera escuchar la gente, si no que te haga feliz a ti. Hay muchos momentos en los que te sientes solo y en los que piensas lo fácil que sería no pensar en lo que hay que hacer y que lo hiciera un equipo de 20 personas por ti. Sin embargo, cuando ves que todo el esfuerzo y trabajo que has puesto se materializa en algo tan chulo es una satisfacción enorme que solo tú sabes lo que ha costado.
P. Tu single Las Alas, que salió el 17 de febrero, es una canción con mensajes muy bonitos y con mucha fuerza. ¿Podríamos decir que es autobiográfica?
Totalmente. El otro disco también era autobiográfico porque son mis canciones y mi vida, pero este es muy autobiográfico del momento vital en el que me encuentro. Las Alas es una canción que, efectivamente, habla de mí y del momento en el que estoy saliendo de esta zona de confort, en el que estoy muy asustada, pero a la vez quiero y voy a volar porque tengo alas para ello. No estoy saltando al vacío sin red, si no que estoy saltando con unas enormes alas que me han llenado de energía y me han impulsado y ayudado a poder volar sola, alto y lejos.
P. Nos comentabas que en este trabajo te encuentras más en solitario que en el primero, ¿qué más diferencias encuentras entre ellos?
Este es un trabajo más maduro, un trabajo en el que he cuidado bastante más las letras y las armonías de las canciones. Creo que hay una Cris bastante más madura y más adulta, por así decirlo, ya que, aunque las otras canciones me encantan y hablan de mí, lo hacen desde el punto de vista de una Cris un poco más pequeñita.
P. Volviendo a tu primer trabajo, “Cris Méndez”, ¿cómo fue la idea de empezar en solitario? ¿Qué te inició a dar este paso?
Desde que dejé el grupo que tenía he tenido mi carrera en solitario, lo que pasa es que iba paralela a mi trabajo con Dani Martín y con su banda, que es un proyecto que me encanta. Cuando alguien te involucra tanto en su proyecto lo haces como tuyo, por lo que inviertes mucho tiempo en él. En mi caso invertí un 80 por ciento de mi energía y un 20 por ciento en mí, y la cosa tenía que ser al revés, pero eso no podía ser porque el nivel y el volumen de trabajo de Dani es brutal, por tanto tenía que tomar la decisión de quedarme siempre de corista y protegida por Dani y por su proyecto o hacer que mi proyecto saliera adelante. Y la respuesta fue mi proyecto, que es mi bebé, mi vida y mi pasión. Siempre le decía a Dani: «ojalá llegue el momento en el que no pueda compaginar las dos cosas, porque significará que me empezará a ir bien y necesite más tiempo para mí».
P. En 2010 empezaste en la banda de Dani Martín. ¿Cómo recuerdas esta etapa?
La recuerdo con muchísima ilusión y con mucho nervio, pero nervio del bueno. Era una vez más salir de mi zona de confort y de lo que estaba haciendo en ese momento para entrar en una liga muy profesional; como pasar del cole a la universidad. También la recuerdo con mucha diversión y trabajo porque lo quería hacer todo muy bien para estar a la altura y poder estar ahí y mantenerme.
P. ¿Qué crees que te ha aportado Dani Martín profesionalmente hablando?
Todo. Han sido siete años de una masterclass constante, una enseñanza constante de todo: de cómo se enfrenta a cada trabajo, a cada concierto, a cada disco; de cómo se comporta con los medios, con los fans, con las discográficas; de la energía que le pone desde que se levanta hasta que se acuesta… Él me ha aportado absolutamente todo y luego su entorno me ha dado la posibilidad de trabajar con los mejores músicos de este país, por lo que he intentado pegarme lo máximo a ellos para poder absorber un uno por ciento de su sabiduría. Es brutal poder estar con todos los músicos de Dani, con todos los que han ido pasando, y con grandes como Sabina, Serrat, Leiva, Alejandro Sanz… Quiero pensar que he ido con las orejas y con los ojos muy abiertos para robar una pizca de la sabiduría de cada persona que ha ido pasando por mi vida y poder plasmarlo en mi trabajo.
P. Como bien comentabas, te has subido al escenario con grandes de la música como Leiva, Serrat, Sabina o Alejandro Sanz. ¿Hay algún concierto que tengas marcado?
El del Palacio de los Deportes con Dani en el que reunió a todos y que fue una constante de: «ahora llega uno, luego otro, después otro», y si a eso, además, le sumas las pruebas de sonido… El hecho de que llegara el señor Sabina o el señor Serrat a las pruebas y que te den dos besos y te pregunten cómo estas y tú pensar: «¡qué barbaridad, que educación, y qué saber estar!». Que siendo Dios vayan y saluden a cada uno es un detalle que me pareció alucinante y maravilloso.
P. ¿Qué tipo de compositora crees que eres, de las que busca la inspiración o de las que la inspiración te encuentra a ti?
Yo creo que sería un poco de las dos. Efectivamente, me ha pasado de un día coger la guitarra y en cinco minutos hacer una canción, por ejemplo, Vida o Sube nacieron así, pero esto pasa las veces que menos. Para mí la composición es un trabajo de constancia. Es como hacer un buen pastel, que por lo general tienes que hacer veinticinco para saber pillar el punto de azúcar, harina, levadura… y así hacer el pastel perfecto, que es lo que buscamos en cada canción.
P. ¿Cómo te ves más, con una guitarra en la mano o con un micrófono?
Es muy difícil, cada vez me veo más con una guitarra en la mano, sin embargo, creo que por ahora todavía soy más cantante que guitarrista. Estoy luchando para que eso por lo menos se iguale.
P. Ahora mismo te encuentras en una gira en la que estas recorriendo y vas a recorrer muchísimas ciudades de España y también de fuera de España tanto sola como acompañada por Dani Martín. ¿Cómo lo estás viviendo?
Me falta todavía por confirmar una de las fechas de fuera de España, pero por ahora estoy teniendo mucha aceptación y una gira de bastantes ciudades en España, y estas cositas, que en cuanto pueda las contaré, como la Miami Fashion Week. Estoy muy contenta y con muchas ganas, ya que me apetece llevar mi música a cuantas más partes del mundo, mejor.
P. ¿Hay alguna ciudad o escenario donde te encantaría tocar?
Me gustaría tocar y visitar muchos sitios porque cualquier escenario es especial. Verme llenar Las Ventas o el Palacio de los Deportes por mí misma son cosas con las que sueño. Ahora mismo Latinoamérica me apetece muchísimo, pero la verdad que cualquier sitio me gustaría.
P. Es importante destacar la gran labor solidaria que hiciste donando los beneficios de Vida a la lucha contra el cáncer a través de la Fundación INTHEOS. ¿Cómo surgió esta colaboración?
La fundación INTHEOS iba a celebrar un aniversario y estaban buscando una canción para poner en sus eventos, en sus reuniones, en su página web… y la canción de Vida tiene mucho que ver con ese espíritu de lucha y de no rendirse nunca. Entonces decidí donar los beneficios y además tocar con ellos en algunos eventos. Al final es algo que nos puede tocar a todos, en todas las familias tenemos casos, unos más cercanos que otros, pero al final es una lucha de todos.
P. En lo que se refiere a futuro, ¿qué te gustaría que ocurriera?
Me gustaría llegar a todo el mundo que fuera capaz. Me gustaría poder sonar en radios ya que creo que es la manera más fácil y rápida de poder llegar a una gran mayoría. Hay mucha gente que de repente te escucha y dice: «me encantas, y no te había escuchado antes», y es que claro, ahora por suerte tenemos las redes sociales con las que puedes ir haciendo un trabajo muy grande, pero eso no quita que las radios tienen que dar voz y cabida a artistas que estén empezando a desarrollarse y también a aquellos que ya están desarrollados. Creo que hay cabida para todo tipo de música y artistas desde emergentes hasta consagrados.
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Dejé Murcia para venirme a Madrid a perseguir mi sueño. Estudio Periodismo y Comunicación audiovisual, ¡ah! y también interpretación. He aquí las tres cosas que más me definen. ¿Mi truco? No parar nunca de moverme, de descubrir, de aprender, de soñar y, en definitiva… De vivir.
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