Bajo SED se oculta Sergio Delgado, un joven canario que lleva toda su vida ligado a la música en diferentes facetas: profesor, compositor, productor y cantante. Tras un parón a raíz de publicar sus dos primeros EPs, vuelve con fuerza con “Aves de museo”, un trabajo compuesto por seis temas donde habla de historias que le tocan de cerca a él y a todo el que las escuche.
Después de sonar con “Paso Vital” a dúo con Alberto Jiménez, la voz de Miss Caffeina, acaba de presentar “Ballena varada”, su último single. Estos y otros temas sonarán el 24 de abril en la sala Siroco de Madrid, donde presentará en directo un show cuidado al detalle en el que pretende guiar al público hacia diversos estados emocionales a través del sonido de sus canciones.
Apuntaos su nombre porque SED dará que hablar…
TITULARES | Entrevista a SED
«Echaba mucho de menos estar en primera línea y sentirme yo el artista»
«Me cuesta bastante escribir si no es algo que alguien cercano o yo mismo haya vivido en primera persona»
«La primera vez que Alberto de Miss Caffeina cantó “Paso Vital” fue como sorpresa en mi cumpleaños»
«Miss Caffeina son gente de puta madre y sin ningún tipo de prejuicio»
«El sonido del directo está encaminado a lo que yo realmente quiero hacer en un futuro»
P. Presentas tu tercer EP tras cuatro años en los que has estado trabajando como productor y compositor para otros artistas. ¿Cómo está siendo esta vuelta a la primera línea de la industria?
Lo he cogido con un montón de ilusión porque llevaba bastante tiempo incubando las canciones de este EP a la vez que tocaba mucho en directo, pero en otros proyectos, como músico. Echaba mucho de menos estar en primera línea y sentirme yo el artista, pero he ido alargando el momento de sacar el EP y gracias a eso hemos podido crear más infraestructura y sentir que tiene algo más de repercusión o que está mejor preparado.
P. En este “Aves de museo” encontramos seis historias especiales sobre seis amigos. ¿Cómo ha sido el proceso de creación de estos temas?
Me cuesta bastante escribir si no es algo que alguien cercano o yo mismo haya vivido en primera persona. Me cuesta imaginarme algo y crear a partir de ahí, entonces mi excusa es contar lo que me pasa a mí y a la gente de mi alrededor, siempre teniendo en cuenta que esto lo va a escuchar mucha gente y hay que intentar crear música con la que puedan sentirse identificados.
P. ¿Hay más temas que hayas dejado fuera de este EP? ¿Tienes pensado mostrarlos en los directos o en algún otro momento?
Hice veinticinco temas y quería hacer un LP, lo que pasa que preferí centrarme en seis, ver qué tal van y guardarme buenos temas para, ojalá, el año que viene meterme a grabar un álbum de doce canciones.
P. Hace unos días estrenaste el videoclip de “Ballena varada”, tu último single y donde mantienes el estilo visual casi retro y jugando con los formatos de pantalla que ya utilizaste en el vídeo de “Paso vital”. ¿Por qué esta estética a la hora de representar tus canciones en imagen?
En este sentido el acierto es de Villa Valencia. Yo les dejé total decisión a ellos. Me pareció muy divertido que se rompiese con la pomposidad, lo fino y elegante que era el videoclip de “Paso Vital” y que “Ballena varada” fuera un contraste de humor absurdo y patético.
P. Hablábamos de “Paso vital”, otro de los temas estrella de este “Aves de museo”, que cantas junto a Alberto de Miss Caffeína y cuya colaboración surgió de una manera bastante peculiar, ¿no?
Sí. He sido seguidor de Miss Caffeina desde 2008 y un día Alberto escuchó “Paso Vital” porque la subí a mi Facebook y me dijeron: «Alberto de Miss Caffeina ha escuchado tu canción y ha dicho que le encanta». Al cabo del tiempo nos terminamos conociendo en persona y por amigos en común terminamos coincidiendo en un concierto. Ahí me propuso que le ayudase a producir las demos de los temas compuestos por él para el disco Oh Long Johnson de Miss Caffeina y al tiempo me dijo que cantáramos “Paso Vital” juntos. Así surgió. De hecho, la primera vez que él cantó “Paso Vital” fue como sorpresa en mi cumpleaños.
P. Como dices, has podido colaborar componiendo algunos temas para Oh Long Johnson, el nuevo disco del grupo. ¿Qué tal ha sido trabajar con Miss Caffeina al completo?
Muy guay. Ellos son gente de puta madre y sin ningún tipo de prejuicio. Les gusta no solo componer entre ellos sino componer con más artistas, músicos y amigos. Tú miras los créditos de cualquier disco de Miss Caffeina y cada canción tiene como dos o tres autores. A Alberto le apetecía un poco cambiar, me lo propuso a mí y todo lo que íbamos mandando iba gustando un montón. De hecho, de siete temas que hicimos han entrado cuatro en el disco.
P. Tras publicar tus dos primeros EP has dedicado estos últimos años más a la producción, colaborando con Elbuenhijo y Borque, entre otros. ¿De qué manera se ha reflejado estos años tras la mesa de mezclas en tus composiciones?
He aprendido cómo no destrozar una canción, a que menos es más y a simplificar y entender en qué elemento está el alma de una canción. En mis primeras grabaciones con veintipocos años era todo añadir y añadir. Hay cosas en mi primer disco que a día de hoy las escucho y digo: ¡madre mía!
P. ¿Qué te llevó a decidir dejar unos años de hacer tu propia música y enfocarte más en otras áreas?
Saqué los dos primeros discos con mucha ilusión, pero sin ningún tipo de infraestructura y conocimiento de dónde me estaba lanzando. Al ver que no terminó de arrancar y que nos habíamos marcado unas metas tipo: «en un año estaremos en todos los festivales de verano» que no pasaron, supongo que me dio una especie de bajón, algo que muchas veces pasa cuando tienes que llevar tu proyecto musical. Decidí parar un poco y meterme más en la industria conociendo gente, haciendo contactos… Muchas cosas que me han pasado me han surgido simplemente por conocer gente nueva que a su vez me presentó otra gente.
P. Vivimos en una época donde tenemos más acceso que nunca a todo tipo de música, pero a la vez también hay más oferta que nunca. ¿Es difícil asomar la cabeza en la industria musical española?
Yo ni siquiera tengo un nombre aún; todavía lucho por conseguirlo. Es complejo, pero soy de los que piensa que con mucho trabajo… Para mí esto es como una extensión, porque soy un privilegiado que trabaja dando clases de guitarra y que vive de la música. No sentiré frustración o que he fracasado si algo no sale, pero sí sé que cuesta mucho.
Creo que la manera de asomar la cabeza es conocer mucha gente, tocar mucho, mejorar, componer mejor… pero sobre todo relacionarte mucho. Todo el mundo tiene a día de hoy acceso a un estudio de grabación, puede grabar en casa y subir su música a Spotify. Para destacar necesitas contactos, moverte, estar ahí y algo de suerte.
P. Una de las ventanas más importantes para un artista son los conciertos y en muy poquitos días, en concreto el 24 de abril, estarás tocando en la sala Siroco de Madrid. ¿Cómo te preparas para una cita como esta?
Llevo un montón de tiempo preparándolo. Soy bastante pejiguero en la parte musical y me gusta que la banda suene bien y los arreglos estén bien hechos. En el proyecto yo no toco e intento solo dedicarme a cantar, pero hemos estado trabajando por separado con los guitarristas durante dos meses. Luego nos hemos juntado con la base rítmica (batería y bajo) y ahora ya todos juntos suena perfecto.
En cuanto a la puesta en escena, estamos trabajando una parte visual guay con unas luces y algo de atrezzo en el escenario para que sea original. Y luego estamos trabajando las colaboraciones. Estará Alberto de Miss Caffeina cantando “Paso Vital” y también Javier Álvarez, un cantautor muy mítico del que soy muy fan desde pequeño.
P. Sabemos que te gusta adaptar tus propias canciones y darles ese plus que las haga diferentes en los conciertos. ¿Cómo va a sonar este “Aves de museo” en directo?
Esa va a ser la gran propuesta de la presentación. El sonido del directo está encaminado a lo que yo realmente quiero hacer en un futuro: una fusión de electrónica con un sonido más orgánico y más indie-pop. A mí me gusta mucho la electrónica de baile, entonces hemos hecho una especie de sesión con tres temas seguidos, siempre sin perder el norte de que yo hago pop y música con estrofa-puente-estribillo. Está todo pensado para crear estados emocionales de quince minutos e intentar que el discurso del concierto tenga varias partes: una más oscura y electrónica, otra más pop, otra más sensible…
P. La cita inmediata ahora es la sala Siroco, pero después de ese día ¿qué más va a venir? ¿por dónde más va a estar sonando SED?
Estamos apostando todo a la presentación del día 24 y, a partir de ahí, estamos en negociaciones para entrar en algún festival. A la vuelta de verano nos centraremos en telonear a gente y compartir conciertos en Madrid con otras salas y ojalá poder salir fuera, pero de momento estamos jugando todo a esta carta.
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