Llevan más de veintiséis días en paradero desconocido y en busca y captura por la policía. Son Marta y Mónica, finalistas del programa La Huida del canal #0 de Movistar+, un reality donde los concursantes deben permanecer ocultos durante veintiocho días mientras un equipo especializado de la policía intenta darles caza utilizando todas las herramientas a su disposición.
Marta Pilar (21) y Mónica Paz (25). Ciudad Real
Alocadas, extrovertidas y risueñas, el aburrimiento nunca entra dentro de sus planes. Se hacen llamar Las Piruletas del Rollo. Leales y fieles a sus amigos pero con dos grandes fallos: el mal carácter y la cabezonería, están convencidas de que si se lo proponen pueden arrasar con todo. Marta es estudiante y camarera, y Mónica Socorrista y decoradora. Participar en ‘La Huida’ es la enésima locura que se les ocurre, buscando demostrarse a sí mismas hasta dónde son capaces de llegar para enfrentarse a sus temores. Su locura y falta de planificación coherente puede convertirse en su mejor estrategia para huir.
El desenlace de la fuga llega este domingo a las 21.30h. Mientras descontamos los minutos para saber si finalmente estamos tan controlados como parece o hay formas de pasar desapercibido, charlamos con las fugitivas más divertidas de la edición y nos cuentan cómo ha sido esta experiencia.
P. Habéis vivido algo único como ha sido participar en esta huida. Contadme, ¿qué tal la experiencia?
Marta: Ha sido un gran reto, una experiencia única que tanto Mónica como yo volveríamos a repetir. La gente ha sido muy amable aunque a nosotras se nos haya ido la lengua a veces (risas).
Mónica: Ojalá no hubiese durado sólo veintiocho días y hubiésemos estado muchos más huyendo. Repetiría la experiencia con Marta porque nos ha unido y, por lo menos a mí, me ha revalorizado como persona.
P. Vuestra estrategia ha sido más bien una no estrategia, porque no teníais una ruta definida y eso también le ha complicado mucho las cosas a la policía. ¿Vuestro planteamiento inicial siempre fue hacerlo así?
Mónica: Nosotras no sabíamos lo que íbamos a hacer. Nos levantábamos y mirábamos el mapa para ver dónde podíamos ir.
Marta: Desde el principio quisimos ir sin estrategia, pero según se acercaba la final sí que decidíamos más dónde queríamos acabar el día. Ya no podíamos improvisar, sobre todo desde que salimos en los periódicos.
P. De eso os quería hablar, ¿cómo fue el momento en el que os enteráis de que han sacado vuestras fotos en el periódico local?
Mónica: Nos quedamos anonadadas. Nosotras pensábamos que la policía nos pisaba los talones y al vernos en los periódicos nos vinimos arriba porque nos dimos cuenta de que lo hacían porque no nos encontraban. Aun así nos entró mucha presión y fue cuando decidimos ser más fuertes que nunca y luchar. Con las Piruletas del rollo nadie puede (risas).
P. ¿Os esperabais llegar hasta el final o pensabais que os cogerían antes?
Mónica: Cuando nos embarcamos en La Huida dijimos que íbamos a por todas y que veintiocho días para nosotras no era nada.
Marta: Yo no esperaba llegar tan lejos. Tenía paranoia persecutoria, soñaba con ello y pensaba que la policía eran los jinetes del Apocalipsis, no dormía tranquila. Creo que ninguna nos lo esperábamos.
P. ¿Qué ha sido lo más duro o lo más difícil de estar veintiocho días en paradero desconocido?
Mónica: Dormir en la calle. El día del refugio, que fue uno de los últimos, nos despertamos a la una de la mañana a -7º porque no podíamos dormir del frío que hacía. Llegamos a pensarnos el abandonar.
P. ¿Pensasteis en abandonar casi el último día?
Mónica: Sí, porque pasamos muchísimo frío. Pusimos toda la ropa que teníamos en el suelo para que el frío nos traspasara menos, pero al final nos acabamos levantando.
P. Supongo que habréis sacado un aprendizaje enorme tras pasar casi un mes viviendo una situación así de extrema. ¿Qué es lo que habéis descubierto de vosotras mismas que antes de esta experiencia no sabíais?
Marta: Gracias a La Huida he aprendido a valorarme más. Me he visto en situaciones que jamás pensé que viviría como pedir cobijo o alimento y me ha servido para valorar más a mi familia, mi casa… Antes de participar tenía el ánimo muy bajo, y ahora creo que puedo conseguir todo lo que me proponga. Ha sido una experiencia muy enriquecedora, porque hasta que no vives algo así, hasta que no te encuentras solo, no te conoces a ti mismo.
Mónica: Yo cuando me embarqué en esto no sabía prácticamente ni quién era, y después de esta experiencia he crecido como persona; soy una persona diferente, no valoro tanto el dinero y creo que con muy poquitas cosas se puede vivir.
P. ¿Y hay algún momento especial que no se haya emitido pero vosotras recordéis como un momento clave de vuestro paso por el concurso?
Marta: En el último capítulo que se emitió hubo un hombre que nos recogió y nos llevó hasta Borja, y en el coche tuvimos una charla donde le contábamos cómo había sido toda nuestra experiencia. Esa charla fue impresionante porque nos sinceramos muchísimo y el hombre casi se pone a llorar. No se ha emitido pero fue un momento muy emotivo.
P. Contáis con 500 euros para sobrevivir lo que dure vuestra huida, pero desde muy al principio ya decíais que no teníais dinero. ¿Era realmente así o fue un poco de estrategia?
Marta: Teníamos 500 euros, pero cada vez que sacábamos dinero a la central le llegaba el aviso, entonces intentamos gastar el mínimo dinero posible. Es verdad que mentíamos y dábamos un poco de pena diciendo que no teníamos dinero y a lo mejor teníamos cincuenta euros en el bolsillo, pero como no sabíamos cuánto íbamos a durar en el programa lo mejor era ahorrar por si llegábamos a la final y teníamos que hacer algún giro inesperado.
P. Hablando de esa recta final de este domingo, ¿cómo fueron esas veintinueve horas a contrarreloj intentando llegar al destino que os había marcado el programa?
Marta: Íbamos contando las horas, los minutos, los segundos… Encima nos dieron coordenadas de un sitio y no sabíamos dónde teníamos que ir.
Mónica: Lo pasamos muy mal. Pensaba que nos iban a separar e íbamos a tener que ir cada una a un sitio y yo sin Marta no podía continuar porque ella pensaba y yo pedía. Tenía miedo porque sin ella me quitaban mi ojo derecho.
P. ¿Ese sprint final fue lo más difícil de la aventura?
Marta: Tuvimos que utilizar cabeza y cuerpo al cien por cien. Date cuenta de que no teníamos reloj ni nada y teníamos que llegar a una hora exacta. Tuvimos que utilizar los cinco sentidos.
P. Una vez has concluido La Huida y vuelves a tu vida normal, ¿cómo es readaptarse de nuevo? Porque imagino que os quedarían paranoias con las cámaras de seguridad, los móviles…
Mónica: Mira, cuando acabamos entrábamos a los bares o a un súper y estábamos pendientes de las cámaras. Decíamos: esta es de vigilancia, esta es de audio… Estábamos muy emparanoiadas. También se me hizo muy raro levantarme y que no estuviera Marta al lado para seguir huyendo.
Marta: El periodo de adaptación fue muy heavy. Volver a tu casa, poder ir a una gasolinera, sentarte a tomar algo en una terraza sin que nadie te persiga… Al principio se quedan secuelas.
P. Ahora que se ha emitido el programa y habéis podido conocer y ver cómo ha sido la huida del resto de compañeros, ¿cómo habéis visto a vuestros rivales en la final, Toño y Rober?
Marta: Pues son dos personas con más capacidades físicas que nosotras, más preparados. Son dos buenos oponentes y se lo han currado mucho porque han hecho muchos kilómetros andando, que eso te quita energía.
P. También habéis podido ver la parte de la policía, cómo trazaron vuestro perfil psicológico, cómo intentaron capturaros… ¿Creéis que os tenían bastante caladas o que se equivocaron con vosotras?
Marta: Cuando nos mostraron como unas fiesteras… A ver, todo el mundo tiene esa parte, somos jóvenes y salimos como todos. Luego dijeron que yo era la más dominante de las dos, quien tenía el control, y tampoco lo considero así. Creo que ambas tenemos mucho carácter, cada una hemos tirado a nuestra manera y por eso lo hemos hecho tan bien. Hay cosas en las que se han equivocado y otras en las que han tenido razón, pero tanto que pensaban que nos íbamos a ir de fiesta… (risas).
P. ¿Creéis que quizá la policía os subestimó y por eso no han podido cogeros?
Marta: Creo que sí. Ellos pensaban que nos iban a coger enseguida por ser las más jóvenes y no saber a lo que nos enfrentábamos y al final eso ha jugado a nuestro favor. No saber dónde íbamos nos ha hecho crecer y hacernos más fuertes.
P. Ahora sólo nos queda esperar al desenlace de este domingo y ver si finalmente sois capturadas o no… Y si no, que cuenten con vosotras para la próxima edición, que por lo que me habéis comentado al principio os encantaría, ¿verdad?
Marta: Por supuesto. Que hagan una repesca para la segunda temporada y que nos vuelvan a meter.
Mónica: Es muy duro, pero las Piruletas del rollo tienen que estar en La Huida siempre.
Agradecimientos: Shine Iberia y Movistar+

Comunicadora, fotógrafa y videógrafa. Me embarqué en YourWay Magazine para vivir desde dentro lo que siempre había seguido desde fuera. Fuente inagotable de conversación sobre cine, música, televisión y Eurovisión. Tan rara como cualquiera.
DESTACADOS
Últimas noticias
- [REPORTAJE] ¿Cómo recibieron los participantes del Benidorm Fest 2024 la noticia de que estaban dentro?
- Estos son los 16 participantes del Benidorm Fest 2024
- Así fue la celebración de los 15 años de ‘Ilustres Ignorantes’
- Rayden se despedirá de Madrid con una cita inolvidable en el WiZink Center
- Aitana, Manuel Turizo y Feid se convierten en los máximos galardonados de ‘Los40 Music Awards’
¿Algo que añadir? ¡Déjanos un comentario!