Esta semana no vamos a dedicarnos a la televisión, lo siento, pero viene la temporada navideña y en el próximo artículo os aburriré con la televisión en navidad… A lo que vamos:
Hace pocos días se estrenó el nuevo disco de Melendi, colocado en pocos días como número uno de ventas en España, pero en todo cuento de hadas existe una bruja, y esta bruja viene con forma de firma de discos. Y es que para sorpresa de muchos, se decidió realizar las firmas de discos en la FNAC, los cuales pusieron GRANDES impedimentos a la hora de que la gente acudiera. Entre ellos un estricto horario de firmas, entrega del tique de compra para demostrar que habías comprado su disco en el establecimiento y no en otro, y para colmo los menores (gran parte del público del cantante) debían acudir con un tutor legal a las firmas. La FNAC se debe pensar que todos los padres de esas criaturas se encuentran en el paro dispuestas a acompañar a sus hijos en pleno invierno a una firma de discos donde la media de espera es de una hora. Finalmente, y debido a todos los problemas que han existido, se han cancelado varias de sus firmas de discos. Y mi pregunta es, ¿cancelan de forma definitiva o se encuentran buscando otra opción?
Todos sabemos que al finalizar el año comienzan a aparecer los rankings de las mejores y peores películas del año según varias revistas de reconocido prestigio internacional. Bien. Iba a comentar alguno de los ranking, pero he decidido que no voy a entrar en ello, porque me he dado cuenta que no coincide ni una sola película en dos rankings diferentes en la misma posición. En algunas revistas son especialistas los que determinan el orden y en otras son los lectores de dichas revistas. Tengo claro que, si dependiera de las revistas tanto la financiación como el estrellato de las películas, la mitad se irían al cajón desastre que toda productora tiene. Eso o los productores irían al manicomio, ya que el hecho de que una película se encuentre en lo alto de un ranking no significa que en la revista de al lado se encuentre en el mismo punto.
Otra de las cosas que no entiendo, es por qué nunca se incluye al cine independiente en dichos rankings. Ese tipo de cine hace mucho más por la sociedad que las cientos de películas que tenemos en Hollywood cada fin de semana. Son películas que se crean e implementan con pocos recursos, con guionistas y actores en muchas ocasiones desconocidos, y que desde mi punto de vista deberían tener un reconocimiento que no les llega ni por parte de la crítica ni por parte de los aficionados al cine. Este próximo año los cines lo tienen todo vendido con el estreno de la nueva entrega de Star Wars y la nueva entrega de Terminator, ¿para qué nos vamos a molestar en promocionar películas desconocidas si lo que nos interesa es vender? Pues señores, en este punto y en esa pregunta, es en la cual pierde la cultura, pierde la sociedad y gana el capitalismo y el dinero.
Y ya para finalizar, y haciendo mención de forma indirecta a una de las grandes polémicas de esta semana, quiero recordaros amigos que vivimos en un país democrático en el cual se supone que la cultura esta democratizada, esto quiere decir que todos debemos tener acceso a ella independientemente de la cultura, el país, la religión o la raza. De hecho la UNESCO determina que la cultura es un derecho universal. Pero últimamente estamos viendo que debido al alto precio del acceso a la cultura, esta se está convirtiendo en algo a lo que solo pueden acceder unos pocos que tienen los recursos suficientes para ello. Entiendo la propiedad intelectual, entiendo que parte de la cultura es parte de la identidad de una persona, pero también entiendo que la cultura es identidad de un pueblo, que la cultura es de todos y para todos. No entiendo por qué se nos recorta el derecho de poder acceder a culturas extranjeras; de que todos los niños no puedan ver el mismo tipo de cultura porque unos tienen recursos y otros no, no entiendo que una persona no pueda disfrutar de cultura porque se encuentre en paro, o porque los recursos que tenga los necesite para comer. Se lucha por lograr una sociedad intercultural, pero después te encuentras con que no puedes acceder a otro tipo de culturas, a otras formas de realizar el trabajo, porque alguien lo impide. Estamos permitiendo que conviertan la cultura en una empresa rentable, y eso a los únicos que nos hará perder, será a la población porque dejaremos de poder acceder a uno de nuestros derechos: la cultura.
Por Alazne Villar (@alaxxtremerock)
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