Sam (Daniel Busquier) es uno de los voluntarios ingleses que viajó a España para unirse a la lucha en la Guerra Civil y Rebecca (Chus Herranz) es una de las tantas madres que sufrieron por no saber dónde estaban ni qué había sido de sus hijos, los destinos de ambos son los protagonistas de este musical.
Con un decorado que es como, me imagino, era lo poco que se tenía entonces, sencillo y reciclable, Goodbye España nos canta una de las muchas historias que tienen lugar durante una guerra desde dos puntos de vista, la entrega de los que luchan y la angustia de los que tienen que seguir con sus vidas mientras esperan.
Tanto las voces masculinas, por un lado, como las femeninas, por otro, consiguen un empaste que da fuerza a muchos de los temas al sentirse todas a una, pero que tiene una pequeña pega: hace que no se entiendan algunos de los mensajes cuando los personajes cantaban a la vez letras distintas. Transmite la agitación del momento, de acuerdo, pero desconcierta el no captar lo que te quieren hacer llegar. Dentro del elenco de voces, todas más que aceptables, cosa que no siempre se puede decir, destacaría la de Rebecca. Podría mojarme y elegir una de las masculinas, pero percibí menos variedad que en las femeninas, con lo que voy a esconderme detrás de la trinchera para no librar esa batalla.
A lo que sí voy a apuntar, sin disparar, es a la excesiva duración de algunas canciones y el batiburrillo que se forma cuando se intentan explicar las ideologías de aquel momento utilizando siglas de formaciones que surgieron con posterioridad, el anacronismo me distrajo y perdí el hilo conductor por unos minutos.
En aquella España en la que valía todo para poder comer, en la que los muertos y los heridos eran números para los que dirigían aquel sinsentido, había o espero que hubiese tiempo para los chascarrillos, el descanso y el amor. Así nos lo deja ver un guion duro con algunos toques de humor y sentimientos que dejan en el espectador la esperanza de que pudieran encontrar en ellos las fuerzas para seguir adelante aquellos que tuvieron que cargar los fusiles o ver cómo les llegaban aquellos sobre los que los habían descargado.
Se agradece que la pretensión de Goodbye España sea la de transmitir y no la de inculcar el mensaje que recibieron los que decidieron combatir en el mismo bando que Sam y se agradece que cada una de las historias muestren las muchas y distintas formas que tiene la guerra de arruinar la vida de los que tienen la mala suerte de cruzarse con ella, cada trama lleva su propia cruz a cuestas.
El desenlace del musical no lo puedo contar, pero el final de la guerra lo sabemos todos. Los voluntarios del bando republicano que vinieron a luchar por aquello en lo que creían se fueron pensando que eran ellos quienes habían perdido, como si hubiese alguien que de las guerras salga ganando.
MÁS INFORMACIÓN
Me apasiona que me cuenten historias desde las tablas, desde la gran pantalla o desde la caja lista. ‘Mary Poppins’ me enganchó al cine, ’10 negritos’ al teatro. Nací con una tele debajo del brazo y un lápiz en la mano izquierda. «Librívora» desde la cuna. Escribo porque no sé vivir de otra manera. Ingeniera de Telecomunicación. Madrid, Madrid, Madrid…
DESTACADOS
Últimas noticias
- Malú celebra su legado musical con la gira ‘A Todo Sí': 25 años sobre el escenario
- Abraham Mateo y Lali nos cuentan su experiencia como jurado de ‘Factor X’
- ZEID FEST 2024: No solo el techno, también los conciertos de Delaporte curan
- ZEID FEST 2024: No hay fronteras… ni techo para Tanxugueiras
- 5 motivos por los que no puedes perderte el Zeid Fest 2025
¿Algo que añadir? ¡Déjanos un comentario!