[CRÓNICA] Second hace un viaje iniciático especial a Madrid

Viaje.

El pasado sábado La Riviera acogió de nuevo a un grupo que suele hacer que en la sala no quepa ni un alfiler. Second hacía una parada más que especial por Madrid para presentar «Viaje Iniciático», el nuevo proyecto que vio la luz gracias al apoyo de todos los seguidores que apostaron por la banda mediante un crowdfunding que en sus primeras 12 horas alcanzó ya la meta de lo necesario para llevarlo a cabo.


Prometía ser un concierto difícil de olvidar, ya que habían manifestado mediante su Facebook que sería «un concierto de dos horas y media» en las que iban a repasar temas de su discografía y a tocar todo su nuevo disco al completo «rodeado de un espectáculo de luces único para la ocasión». Y yo tenía muchas ganas de ver de qué se trataba.

Puntuales como un reloj, a las 21h se apagaron las luces y, mientras un sonido ambiental iba cogiendo cada vez más fuerza, empezó a salir el humo por todos lados a la vez que Second salía al encuentro entre vitoreos. El espectáculo de iluminación no se hizo esperar: cinco paneles de luces repartidos en dos hileras en el escenario empezaron a iluminarse y apagarse al ritmo de Esto es solo el principio, que enlazó con Primera vez a través de los aplausos del público.

«¡Muchas gracias! Ahora vamos a hacer un viaje al futuro, en concreto 2502» dijo Sean. Otro de los fuertes de la noche fue la pantalla del fondo del escenario. Normalmente Second suele colocar ahí su logotipo de forma permanente, pero en esta ocasión habían preparado también vídeos para ambientar mejor, si cabe, las canciones. Un simulacro de interferencias en él nos teletransportó ni más ni menos que a un futuro bastante lejano donde seguimos dándolo todo.

Al terminar, un fundido a negro no dejó descansar a nadie, puesto que acto seguido sonaron Pueblo submarino y Muérdeme ante unas luces de tonos violetas y verdes. Se nota que esta última es de las favoritas de cada concierto, ya que el público no dejó de saltar y cantar al unísono. Nuevamente, en la pantalla apareció la palabra Muérdeme cada vez que se pronunciaba en los estribillos.

Sean volvió a dirigirse a los asistentes para agradecer su asistencia a pesar de las demás ofertas de ocio que se daban ese mismo día, en concreto el clásico de fútbol. «Esto de aquí sí que ha sido un estadio. Estamos emocionados de volver a llenar La Riviera y esperamos que hoy nos vayamos todos con una sensación única» dijo entre aplausos. Tras Más suerte y Mañana es domingo (y tan cierto que lo era), vino otra de las preferidas: Psicopático. Ni que decir lo que se montó con esta canción, ¿no? Todo el público cantando y saltando mientras las luces no dejaban de moverse y los paneles de dar fogonazos.

Después de tocar Julia Ladouce invitaron al escenario a alguien a quien admiran: Miguel Rivera, del grupo Maga, se sumó a Second para interpretar Lo único. La distancia no es velocidad por tiempo fue un parón para recuperar energías para Las serpientes, en la cual el vocalista se colocó en el escalón frente al foso donde estaba todo el público para cantar aún más cerca.

Sean volvió a agradecer a todos los presentes que habían venido desde distintas ciudades hasta allí. Tras estas palabras interpretaron Millones de habitantes y Nueva sensación, que forma parte de la BSO de Sólo química, una película de Alfonso Albacete —presente aquella noche— en la que han colaborado varios cantantes y bandas de nuestro país.

En el puente de Solo el cantante salió del escenario para reponer fuerzas unos segundos, volviendo con una nueva batería interior para acabar el concierto con fuerza e interpretar Rodamos. La banda salió del escenario ante los silbidos de la gente que sabían que el concierto no había acabado y querían saltar más.

Al salir de nuevo, Sean volvió a hablar con los allí presentes: «por muchos años que llevemos en esto, siempre nos gustan los comienzos, los viajes iniciáticos, evolucionar y sentirnos inexpertos». Nivel inexperto, como era de esperar, sonó para que todos volviésemos al ambiente festivo que se estaba disfrutando por cada costado de la sala. El otro invitado de la noche fue Alejandro Jordá, del grupo Izal, que se sumó a la batería en el tema Nos miran mal. Para este tema se vieron múltiples ojos abriéndose y cerrándose y mirando a los lados en la pantalla del escenario ante las luces rojas y azules. Pensé que Mercedes Milá saldría en cualquier momento.

Tras la marcha del componente de Izal tocaron Donde vive el vértigo y, tras ella, la gran favorita para muchos (entre los que me incluyo): Nada. Los aplausos se hicieron notar desde los primeros acordes y el público la cantó entera, terminando las últimas frases casi a capela.

Un nuevo amago de marcha del escenario se presenció después de Autodestructivos, en la que aparecieron múltiples números rojos simulando la cuenta atrás de algún dispositivo y acabando con fogonazos de luces y sonidos. Eran los últimos temas y había que terminar la fiesta de una forma especial. Al volver, presentaron Algo, una canción de las antiguas que crearon Sean y Jorge en los inicios de la banda y que cantaron en formato acústico sólo con voz y guitarra (no aparecía ni siquiera en el tracklist del concierto).

Tras Atrévete, Sean hizo la última intervención para volver a agradecer la asistencia e implicación de la gente con ellos. «No vamos a olvidar esta noche tan fácilmente», dijo mientras se preparaban para acabar por todo lo alto. Ya es un ritual, pero siempre la última canción es la que define cómo sentimos el recinto cada vez que Second nos deleita en concierto: un Rincón exquisito. Ni que decir que la gente saltó, gritó, cantó y bailó para despedir a Second, y que en uno de los estribillos, cuando suelen cortar la música para que todos griten “todo el universo”, saltó confeti y serpentinas por toda la sala.

Por su parte, acabaron una noche inolvidable pinchando en otra sala de Madrid con los que se desplazaron hasta allí para terminar la fiesta. Por la mía, acabé con una nueva sensación. Y es que volvieron a sorprender a todos con las luces, nuevos giros y retoques en las canciones antiguas, su fuerza y energía en el escenario y los vídeos de la pantalla haciéndonos sentir, por una vez más, inexpertos en sus espectáculos.

Yo volveré en breve, mientras tanto ya sabéis qué hacer… ¡Sonreíd!

¡Hasta pronto! ^^

Fotografías: Rocío Muñoz
Agradecimientos: G-News

Raúl Núñez

Diseñador Gráfico, Seriéfilo y Gamer en Youtube. No concibo una vida sin música, por ello canto y compongo.

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